El encuentro de Trabajo Social realizado el sábado pasado en la facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora dejó como saldo un debate abierto que recién empieza a delinear algunos aspectos a tratar.
La escasa discusión al interior de la comunidad educativa que atañe a las carreras de esta casa de estudios no exceptúa a Trabajo Social. Pero este incipiente ámbito de puesta en común, reflexión y contrapuntos abre el juego a una nueva etapa en el cómo se plantea, elabora y desarrolla un área de estudio y práctica universitaria.
Al encontrarse reunidos estudiantes, graduados, docentes –tanto de la UNLZ como de otras universidades—pudieron evidenciarse posturas cruzadas en un rico debate que no sentó más que la necesidad de más debate.
Los principales planteos estudiantiles giraron en torno a la necesidad de fortalecer un nuevo perfil profesional sustentado en prácticas pre-profesionales que tengan continuidad a lo largo de la carrera y que apunten a potenciar la capacidad de transformación del sujeto. Inconsistencia entre objetivos de la materia y posibilidad que brinda la institución en la que se trabaja, fue un punto remarcado por los estudiantes.
Además, solicitaron a los docentes el armado de espacios de diálogo entre cátedras, dados los saltos entre cátedras complementarias. En esta dirección se apuntó a trabajar sobre la construcción de prácticas integradas y reformular aspectos teóricos y metodológicos.
La necesidad de redefinir categorías en el Trabajo Social fue marcado como una necesidad esencial que atañe a los estudiantes, docentes e investigadores y que empieza a debatirse en otras casas de estudio del país. Es imperioso caminar en dirección opuesta a la lógica positivista que todavía tiene sustratos en la conformación pedagógica de la carrera.
Eliminar las contradicciones entre discurso crítico y acción acrítica. El deber de asumir que la intervención del trabajador social y la dimensión política de su rol son inseparables es otro punto emergente del taller. Ahí, apareció el futuro debate de qué perfil político en el sentido histórico, antropológico y sociológico de la palabra asumen y asumirán los estudiantes hoy, profesionales mañana. Saldar el debate de que el estudiante forma parte de la sociedad y está inmerso en las contradicciones que devienen de ésta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario